Me gusta pensar que todo pasa por algo, que lo casual es poco frecuente y que hay saber encontrarse cómodo en la mayoría de las circunstancias que nos trae la vida, aunque estas no siempre nos gusten. El retraso de 20 días de United Airlines y National Air Cargo por haber perdido la documentación más otros 10 por haberme roto el casco en el envío –y haber tenido que pedir a BMW Ibérica y Movilnorte que me enviaran otro– afecta considerablemente a ese mágico azar que determina con quién te cruzas en el camino y qué haces en él mientras tanto.